Santiago el Real

HOSPITALEROS

Cerámica conmemorativa de los 25 años de la fundación de la ´de la organización de los Hospitaleros voluntarios

 

Si has realizado el Camino,
Si tienes tiempo libre,
y si quieres sentir el Camino de otra manera…

Querido/a amigo/a:

Desde la Federación Española de Asociaciones de Amigos del Camino de Santiago te explicamos aquí lo que son nuestros Hospitaleros Voluntarios y su funcionamiento.

En los últimos años un numeroso grupo de personas de toda edad y condición, se ha propuesto renovar un aspecto de esa hospitalidad merced al trabajo de los hospitaleros y voluntarios culturales del Camino de Santiago. Estos hospitaleros son antiguos peregrinos que dedican parte de sus vacaciones a atender, de forma voluntaria y gratuita, los albergues de peregrinos, y a colaborar en la difusión de los contenidos artísticos, culturales y espirituales del Camino.

Para nosotros el único requisito necesario para ser hospitalero es haber hecho la peregrinación a Santiago y querer dedicar tu tiempo y capacidades de modo altruista a la acogida. Creemos que para poder realizar bien este cometido, es muy importante que los nuevos hospitaleros hagan un cursillo de preparación para conocer de antemano lo que van a encontrar en esa otra cara del Camino, que es la hospitalidad y que suele ser un trabajo duro, nada parecido a unas vacaciones alternativas.

Programa de Adiestramiento

Normalmente, a principios de año, entre febrero y junio, se organizan una serie de cursillos preparatorios para aquellas personas que se hayan puesto en contacto con nosotros con la decisión de trabajar como hospitalero durante ese año.  Estas personas nos han remitido sus datos personales y toda aquella información que pueda ser interesante para el trabajo posterior.  Dichos cursillos tienen lugar durante el fin de semana, empiezan el viernes por la noche y terminan el domingo después de comer y es OBLIGATORIO el hacerlos.  De forma muy excepcional y para aquellas personas a las que les es materialmente imposible desplazarse para hacer un cursillo por ejemplo, por residir fuera de España, les ofrecemos también la posibilidad de estar tres días en un albergue para familiarizarse con el trabajo antes de incorporarse al albergue que se les asigne.

Compromiso de Tiempo

El tiempo normal de estancia en un albergue es de 15 días, la primera o la segunda quincena de cada mes.  Nos gustaría llamar la atención en este tema. Es muy importante procurar cumplir con este periodo quincenal; os aconsejamos que preveáis con antelación el tiempo del que podéis disponer, que estéis muy seguros de las fechas que nos decís para que os asignemos un destino.  De igual modo, si hay algún cambio, es importante que nos los comuniquéis cuanto antes, ya que a nosotros nos dificulta mucho el que luego no podáis cumplir con lo que habéis dicho y nos creéis lagunas en albergues con tan poco tiempo, que no podamos encontrar una solución; ya que al final, hay albergues sin hospitaleros que posiblemente podrían haber tenido a otra persona de haberlo sabido con antelación suficiente.  En algunos casos, y si así lo deseáis, el tiempo de estancia como hospitalero puede ser más amplio, no siendo aconsejables estancias superiores a un mes.

Hospitaleros españoles marchan a Roma para celebrar junto a italianos el 25 aniversario de Hospitaleros Voluntarios en audiencia general con el Papa

Federación Española de Asociaciones de Amigos del Camino de Santiago
ROMA (Ciudad del Vaticano) / HOSPITALEROS VOLUNTARIOS. 15 de Septiembre de 2015
Imagen: Los hospitaleros en Roma / HosVol
Fuente : Hospitaleros Voluntarios

Unos 60 hospitaleros voluntarios asistieron a la audiencia general de S.S. el Papa Francisco el pasado 9 de septiembre 2015 en la plaza de San Pedro de Roma.

La iniciativa para esta peregrinación partió de Laura Monastier, una veterana hospitalera y colaboradora con Hospitaleros, la revista Peregrino y la Federación propiamente, que se encargó de todo lo necesario para que el grupo llegara hasta la columnata de Bernini en las primerisimas horas del día 9.

Hospitaleros italianos y españoles (entre los que también se contaba con la presidente de la FEAACS) vieron en esta audiencia otro modo de celebrar los XXV años de Hospitaleros voluntarios.

El grupo hizo llegar al Santo Padre dos regalos alusivos a Hospitaleros y su aniversario y, en la plaza de San Pedro mientras Francisco se movía entre los romeros, recogieron para él el muñequito que desde nuestros orígenes identifica a Hospitaleros de la Federación.

Escuchamos su saludo en medio de la algarabía que su presencia provoca y las palabras de su catequesis con respeto y silencio.

Palabras referentes a la familia terrenal y a la Iglesia como familia espiritual. Aludió a la relación que la Iglesia y las parroquias han de tener con las familias para que éstas se impliquen más en la vida cristiana.  Y habló de acogida y hospitalidad sin distinciones basándose en la solidaridad que es la enseñanza de Jesús desde su primera aparición pública.

Por la tarde el grupo asistió a misa en el altar mayor de la Basílica de San Pedro que estuvo concelebrada entre otros por don Jesús el párroco de Grañón y don José Ignacio el párroco de Santiago el Real de Logroño.

El jueves comenzaron las despedidas no sin antes volver a San Pedro para celebrar de nuevo la Eucaristía en la capilla de San José con don Jesús como oficiante y los cánticos de algunos hospitaleros de buen hacer. Al final, todos juntos entonamos con buen ánimo frente al poderoso baldaquino, Le Chant du Pellerin -un himno para Hospitaleros-.

La emoción mayor nos esperaba a la salida del templo cuando “volvió” a nosotros el muñihospi ahora bendecido por Francisco que, al tenerlo en las manos, hizo notar la forma de Cruz de nuestro emblema al tiempo que nos recomendaba “ser misericordiosos”.

Guardaremos con honor y devoción este colgante, las enseñanzas del Papa y su recomendación.